Santa Rosa de Viterbo le da el último adiós, a la pequeña Victoria Guadalupe.
INBOX POLÍTICO/ Claudio G. Osornio
Este domingo se llevó acabo, en el templo de Santa Rosa de Viterbo, la misa de cuerpo presente de la pequeña Vicky para posteriormente ser llevada a su última morada, en el Panteón del Cimatario, en la capital del estado de Querétaro.
Los padres de la menor al término de la eucaristía soltaron palomas blancas como símbolo de paz y de libertar para la pequeña, quien fue asesinada y violada el pasado miércoles, por un vecino suyo, originario de Oaxaca, quien ya fue detenido por las autoridades estatales.
El caso de la pequeña Victoria, sin duda, marcará un antes y un después.
La movilización social que se generó por este caso, así como el eco en las redes sociales, es una prueba de los tiempos de inseguridad que se están viviendo, no sólo en Querétaro sino en todo el país.
En esta ocasión, aunque el final sin duda es trágico y triste, reconforta el que las autoridades realizaron su trabajo de manera expedita y el culpable de esta atrocidad, podrá alcanzar una pena de hasta 50 años de prisión.
Solo resta desearle pronta resignación a los padres de Vicky y a ella “que vuele alto y descanse en paz”.
