Orientación Escolar
TAREA CIUDADANA/ Servando Miranda
“Educar correctamente a la juventud, no significa meterles en la cabeza una mezcla de palabras, frases, aforismos y opiniones extraídas de los autores. Significa descubrir las auténticas facilidades para comprender las cosas”.
De entre muchas de mis grandes satisfacciones como profesional de la educación fue mi paso por las escuelas secundarias Generales y Técnicas del país ejerciendo mi especialidad como Orientador Vocacional y teniendo la oportunidad de atender a todos aquellos jóvenes en cuestiones tan importantes como es la integración y el desarrollo de su personalidad.
Su personalidad tan cambiante si consideramos que ella se integra con el temperamento y el carácter y es este último factor el que incide de tal manera que lo que ayer parecía bueno hoy ya no lo es y en esa dinámica aparecen los cambios de comportamiento y de actitud de los adolescentes que se ven influenciados por la moda y el medio social que no siempre es lo mejor para ellos.
Visto lo anterior, reviste particular importancia el hecho de que nuestro Sistema Educativo tiene que considerar a la Orientación Educativa como un agente determinante para la adaptación de los estudiantes al medio escolar, social y familiar.
Hoy por hoy tengo que reiterar (aunque en ello se incomoden algunos docentes y padres de familia), que la falta de compromiso de unos y la irresponsabilidad de otros, orillan a que los estudiantes pierdan el interés por los estudios y en mas de una ocasión sea factor de deserción escolar.
En mi andar pues, participando en diferentes foros, me pronuncié con objetividad y presentando lo que av nuestra experiencia podían ser la alternativas más adecuadas para controlar y en su momento desterrar estos lacerantes problemas.
Estos preocupantes altos índices de Reprobación y Deserción Escolar se han visto disparados en últimas fechas de ahí la importancia de que quienes tienen a su cargo el diseño de planes y programas para la educación media y media superior asuman que con el presente y futuro de las nuevas generaciones no se puede seguir omitiendo las verdaderas necesidades de formación integral que ellas requieren.
Observar al alumno en la conformación multidimensional de su personalidad para partir en un principio, con el ejercicio dinámico de la coparticipación de docentes y padres de familia con el Orientador Escolar; paso seguido sería dar continuidad a lo programas de Actualización y Capacitación del Magisterio dado que a muchos docentes se les ha olvidado o han dejado de lado que su compromiso es ni más ni menos que la Formación de mujeres y hombres útiles a la sociedad.
Participando de la opinión de Carlos Salazar Romero podemos asegurar que “cuando el maestro no hace uso adecuado y constante de los auxiliares didácticos, la afirmación de conocimientos en el alumno no tiene la intensidad suficiente”.
Es mas complejo el abordar este problema de la Reprobación y Deserción Escolar y este espacio por hoy nos resulta insuficiente, en la medida que los lectores muestren interés por el tema y con la venia de nuestro Director, habremos con gusto ampliar nuestra opinión.
Por ahora agradezco en todo lo que vale su tiempo para leer estas letras.