Fraccionamiento La Rueda: “La isla del engaño”
LA NUEVA POLÍTICA/ Trinidad Cachûa
Iniciemos la historia con el ex presidente de México, Ernesto Zedillo Ponce de León, quien durante su gobierno (1994-2000) realizo el 23 de diciembre de 1999 la más ambiciosa reforma que se ha dado en la historia de nuestro país al artículo 115 constitucional, en este punto concentrémonos en la fracción V y sus incisos A y D, los cuales consisten en otorgarles el derecho a los gobiernos municipales para poder otorgar cambios de uso de suelo en su territorio, esto mediante cada cabildo municipal.
A partir de ese momento los ayuntamientos reciben un gran poder, lamentablemente en nuestro municipio algunos no tuvieron escrúpulos y tomaron decisiones que hoy tienen a miles de familias damnificadas en varias partes de San Juan del Río, siendo una de las más afectadas la población que radica en el Fraccionamiento de La Rueda, en San Pedro Ahuacatlán, quienes fueron ultrajados por empresarios del ramo de la construcción y políticos, sin tocarse el corazón.
En los terrenos que hoy ocupa dicha colonia, anteriormente se tenia un viñedo, y estaba concesionada esa región que siempre fue contemplada como zona de reserva federal por la cercanía con el cauce natural del Rio San Juan, era Alonso del Cañizo quien tuvo la concesión de ese espacio territorial, y quien al fallecer podía heredarla a su familia, siendo un lugar que tenia de manera segura el riesgo de sufrir en cualquier momento inundaciones, se podría entender que no resultara de interés para los familiares seguir conservándola.
Hasta aquí nadie puede ser señalado como responsable, pero entonces surge el interés de un grupo de empresarios que de alguna manera se hizo de esa concesión y comenzó a “operar indebidamente” el poder obtener una escritura pública de esos terrenos, mediante el consentimiento de un notario público que se prestara al juego sucio, el cual se encargo de efectuar la escrituración de manera ilegal, probablemente un notario de este municipio o de la capital queretana.
Diversas fuentes que fueron parte del gobierno municipal de la Lic. Jacaranda López Salas, refieren que presuntamente fue el empresario de la construcción, Luis Alfonso García Alcocer, mejor conocido como “El Ponty” (Presidente del año 1997 al 2000 de la Federación Nacional de Promotores Industriales de Vivienda A.C. del 2004 al 2006 estuvo como Presidente de la Coparmex, y del 2015 al 2018 Presidio el Club de Industriales de Querétaro, hoy es dueño de la empresa constructora Casas Ponty, que opera en Querétaro y Guanajuato), quien estuvo muy cercano a la administración municipal 2003-2006 encabezada por López Salas, promoviendo el cambio de uso de suelo de esa extensión territorial que antes era un viñedo y poder convertirla en una zona de vivienda como lo es ahora, está por demás comprobado que fue justamente el cabildo sanjuanense de esa administración pública municipal quienes otorgaron el cambio de uso de suelo de lo que hoy es La Rueda.
Pero fue hasta el trienio 2006 al 2009 que el entonces alcalde municipal, Ing. Jorge Rivadeneyra Diaz, autorizo la construcción de dicho fraccionamiento, y posteriormente en la administración municipal del 2012 al 2015, encabezada por el Lic. Fabian Pineda Morales, se autorizó la construcción de los edificios conocidos como La Rioja, ubicados dentro del mismo fraccionamiento.
Dentro de toda esta historia que hoy tiene a miles de familias sufriendo la perdida de su patrimonio, con una propiedad que después de vivir nuevamente una terrible inundación, deja sin valor cada domicilio asentado en esos terrenos, que fueron victimas del engaño de empresarios y la arbitrariedad de políticos, los cuales se atrevieron a conceder y construir un fraccionamiento en una isla, dejando en el naufragio de cada hogar la marca de su más absoluto desinterés social, queda solo una opción, la reubicación total del fraccionamiento, y en el horizonte la decisión de proceder contra quienes resulten responsables, esto último como una decisión conjunta en las manos de todos los afectados.