A propósito de Medios.
TAREA CIUDADANA/ Servando Miranda
Por diferentes medios hemos venido leyendo y escuchando opiniones y temerarias acusaciones sobre personas e instituciones. Sorprende observar como personajes antes admirados y respetados han entrado a una dinámica no muy decente.
No es mi intención entrar al mismo juego que se viene jugando en las redes sociales en dónde personas sin el mínimo conocimiento y sin ninguna preparación que los ubique como analistas políticos y sociales lanzan acusaciones sin sustento solo amparados por inconsistentes informaciones.
Que si el señor Loret es o no corrupto, que si ha vivido eternamente del chayote no es para sorprendernos.
En mi paso por la lucha social he visto a un gran número de “periodistas” entregados a las alabanzas en favor de personajes dañinos al pueblo de México, los vimos en los años 60s cuando la juventud de entonces intentaba alcanzar un cambio para la vida política y social de nuestro País y esas inquietudes dieron también paso a manifestar nuestras inconformidades y miren si no, como estudiantes-maestros en la Escuela Normal Superior de México nos vimos en la triste situación de que en nuestra Institución NO había laboratorios, ni para física, química y biología menos aún para quienes cursábamos la especialidad de psicología educativa los maestros-alumnos ponían en práctica la teoría, en los laboratorios de las Escuelas secundarias donde laboraban.
Y todo porque? Pues era claro que a los gobiernos No les interesaba la educación, era más cómodo mantener ignorante al pueblo. Pero como señalo antes, los periódicos del momento se volcaban en adulaciones hacia los gobernantes en turno.
Recuerdo con respeto a don Ángel Viniegra valiente columnista del entonces periódico Novedades quien apoyó desde el Inicio nuestras protestas estudiantiles en contra de los funcionarios de la SEP; recuerdo que tomando café en el famoso Café Habana, nos decía que No Todos los Periodistas eran Corruptos, Borrachos y “Vendidos”.
Pues bien, de aquellos medios de comunicación nocivos claro que hay herencias y los encontramos en todos los niveles y lugares.
Personas que por años han vivido pegados a la ubre de los gobiernos a los que sin ningún recato les dan golpes periodísticos para después recurrir al chantaje exigiendo el famoso Chayo a cambio de no hacerlo.
Yo soy testigo de como La Mayoría de quienes se dedican a esta noble y útil actividad En San Juan lo hacen con profesionalismo, con intención de ser informadores de lo que realmente mueve a la sociedad, y los vemos en las calles, en los sitios de reunión buscando la nota que sirva de orientación a los ciudadanos.
Muy raro es aquel que desde una cómoda oficina o desde una mesa de restaurante o de cantina escribe notas que solo son perversas ocurrencias.
La Mayoría de los comunicadores Sanjuanenses son personas socialmente comprometidas y a quienes desde estas líneas me permito REITERARLES MI AMISTAD, ADMIRACIÓN Y RESPETO.
Nombres? no quiero decirlos para no cometer omisiones. Pero ELLAS Y ELLOS saben de quienes hablo, siempre presentes en mi mente y en mi corazón.